El pasado martes 1 de octubre de 2024, Claudia Sheinbaum Pardo se convirtió en la primera presidenta de México. Como parte del programa de desarrollo tecnológico para la innovación, dio a conocer que durante su sexenio en el país se producirá un automóvil eléctrico de nombre Olinia, que en náhuatl significa moverse.
No obstante, semanas atrás, a mitad del mes de septiembre, Conahcyt, el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías dejo ver a Taruk, el primer autobús eléctrico mexicano.
Este camión cero emisiones, de hecho, en un futuro podría competirle de forma directa a los fabricantes chinos de vehículos que no contaminan, como lo son JAC o BYD.
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Taruk: Las bases del nuevo transporte público eléctrico
Como lo dio a conocer Conahcyt, este proyecto forma parte de los esfuerzos del Gobierno de México. La creación de Taruk (significa correcaminos en lengua yaqui), de hecho, se da para impulsar el aprovechamiento soberano del litio del Plan Sonora en energías sostenibles.
La intención principal de la presentación de este autobús eléctrico fabricado en México, es sentar las bases para una industria del transporte público eléctrico.
“Taruk simboliza un avance estratégico en la cadena productiva de la industria del litio, específicamente en su aplicación para baterías destinadas a la electromovilidad del transporte público”, explica Conahcyt en un comunicado.
También, la directora general del Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías, la Doctora María Elena Álvarez-Buylla Roces, en el acto protocolario que se llevó a cabo comentó que “Taruk representa la consolidación de grandes esfuerzos”, aparte de que es “fruto del talento de ingenieras e ingenieros mexicanos”.
Por otro lado, la Doctora Aideé Orozco Hernández, directora adjunta de Desarrollo Tecnológico, Vinculación e Innovación del Conahcyt, comentó que el autobús Taruk “se diseñó con apoyo de dos empresas mexicanas de base tecnológica, Megaflux y Grupo DINA, en colaboración con el Centro de Tecnología Avanzada (CIATEQ)”. Lo interesante es que este Centro Público que está impulsando la movilidad sostenible es coordinado por Conahcyt, así como por el Instituto de Ingeniería de la UNAM y la UAM, específicamente la unidad ubicada en Iztapalapa.
Taruk, al igual que Olinia, se espera que impulse la electromovilidad, y que comience a estar cada vez más presente en México, principalmente en el transporte público.
Incluso, como lo explica Conahcyt en su boletín: “Taruk es una alternativa para reducir el uso de vehículos particulares, disminuir costos, congestionamiento y promueve una movilidad urbana inclusiva”. Por otro lado, esta iniciativa también, para el futuro, se espera que traiga “beneficios ambientales y de salud”, de acuerdo al Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías.
Taruk estará a prueba en la Ciudad de México
Conahcyt igualmente dio a conocer que el autobús eléctrico mexicano Taruk, se pondrá a prueba y formará parte de la Ruta 46 de la Red de Transporte de Pasajeros (RTP). Entonces, esta unidad cero emisiones recorrerá los 22 kilómetros –donde hay 39 paradas– que pasan por las alcaldías de la Ciudad de México: Iztacalco, Iztapalapa y Tláhuac.