Estacionar en una pendiente, ya sea en subida o bajada, implica un mayor riesgo si no se toman las medidas adecuadas. Una maniobra incorrecta puede ocasionar que el vehículo se desplace por sí solo, provocando accidentes o daños. Por ello, es fundamental conocer y aplicar las precauciones necesarias para asegurar el auto correctamente en este tipo de situaciones.
De acuerdo con Bridgestone, el freno de mano, también conocido como freno de estacionamiento, es la primera línea de defensa para evitar que el auto se mueva. Asegúrate de accionarlo por completo antes de soltar el pedal del freno, especialmente en calles inclinadas.
Si tu auto tiene transmisión manual, déjalo en primera si estás en subida, o en reversa si estás en bajada. Si es automático, asegúrate de dejarlo en “P” (Parking). Este paso evita que el coche ruede, incluso si el freno de mano falla.
Otra acción que será de gran ayuda para prevenir accidentes es girar las llantas según el sentido de la pendiente. Si estás en subida y hay banqueta, gíralas hacia la calle (izquierda); si es en bajada, gíralas hacia la banqueta (derecha).
Mientras que, en pendientes sin banqueta, siempre gira las ruedas hacia la derecha, sin importar si subes o bajas. Esto permite que, en caso de falla del freno, el auto se detenga contra la banqueta en lugar de rodar cuesta abajo.
Objetos de apoyo al estacionar en pendientes
En pendientes muy pronunciadas o si vas a dejar el vehículo estacionado por mucho tiempo, es recomendable usar cuñas o topes detrás de las ruedas. Esto añade una capa extra de seguridad.
Antes de abandonar el auto, asegúrate de que esté bien asegurado, con freno de mano activo, las llantas giradas correctamente, y la marcha colocada. Tomar estas precauciones al estacionar en pendientes es esencial para tu seguridad, la de otros conductores y la integridad de tu vehículo.
