Los recientes incidentes viales en los que varios autos resultaron incendiados han puesto en alerta a los automovilistas sobre los riesgos de perder su patrimonio en cuestión de minutos. Aunque el fuego en vehículos puede ser provocado por accidentes, fallas mecánicas, cortocircuitos o incluso actos vandálicos, no todos los seguros protegen contra este tipo de siniestros, lo que deja a muchos conductores sin respaldo económico.
De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), el seguro de responsabilidad civil, que es el más básico y obligatorio en México, no cubre incendios. Este tipo de póliza únicamente protege al conductor en caso de causar daños a terceros en sus bienes o personas. Por ello, quienes solo cuentan con esta cobertura mínima tendrían que absorber todos los gastos en caso de que su automóvil resulte dañado por fuego.
La alternativa para estar protegido es contratar una cobertura amplia o limitada. La amplia incluye daños materiales, entre ellos los ocasionados por incendios, choques, vuelcos o fenómenos naturales. En tanto, la limitada contempla pérdida total por robo o incendio, aunque no cubre reparaciones por daños menores. La elección depende de la antigüedad del auto, el uso que se le dé y la capacidad de pago del asegurado.
Recomendaciones extra al elegir un seguro
Se recomienda revisar con detalle la letra pequeña de la póliza, ya que algunas aseguradoras solo responden si el incendio es consecuencia de un accidente vial, mientras que otras sí amparan casos de fallas eléctricas o mecánicas. Además, es importante verificar el deducible, es decir, el porcentaje del daño que deberá cubrir el propietario en caso de siniestro.
En escenarios recientes, varios automovilistas afectados por incendios en vialidades de la Ciudad de México han señalado que no contaban con una póliza adecuada, lo que representa pérdidas superiores a los 200 mil pesos en vehículos de gama media. Las aseguradoras advierten que este tipo de siniestros son más comunes de lo que parece, especialmente en autos con modificaciones eléctricas no certificadas o con mantenimientos irregulares.
Para evitar perderlo todo tras un incendio vehicular, lo más recomendable es contratar al menos una cobertura limitada, y en lo posible una cobertura amplia, además de dar un mantenimiento constante al auto. El seguro adecuado puede marcar la diferencia entre una pérdida millonaria y una recuperación parcial o total del valor del vehículo.
