Un viaje largo en auto eléctrico requiere preparación extra para evitar contratiempos con la autonomía, con la infraestructura de carga y con las condiciones del clima. Por ello, te compartiremos recomendaciones prácticas para que tu travesía sea lo más fluida posible.
Planifica tu ruta incluyendo estaciones de carga
Antes de salir, haz un plan de ruta que considere paradas de carga. Usa aplicaciones o los mapas integrados del vehículo para ubicar puntos de carga compatibles, su potencia, tipo de conector y horarios de disponibilidad. Define paradas cada cierto tramo para evitar que la batería esté en niveles críticos; una buena regla es planear cargar cuando la batería esté alrededor de un 20-30%.
Asegúrate de tener buen nivel de carga desde el inicio
Salir con la batería lo más llena posible te da tranquilidad y margen de maniobra. Si puedes, carga por la noche antes de partir. Algunos fabricantes recomiendan evitar cargar al 100% de forma constante, para preservar la vida útil de la batería, pero cuando vas de viaje largo, una carga completa tiene sentido.
Verifica estado general del auto
Haz una revisión básica previa: presión de neumáticos, unos bien inflados ayudan a tener menor consumo; correcto funcionamiento de frenos, que todas las luces funcionen, sistema de climatización, carga de accesorios. Cualquier fallo pequeño puede afectar tu autonomía o seguridad.
Usa modos de conducción eficientes
Adopta una conducción suave: evita aceleraciones bruscas, mantén velocidad constante, usa modo de conducción “Eco” si tu auto lo permite, maximiza la recuperación de energía con frenado regenerativo. Limita el uso de aire acondicionado o calefacción excesiva, ya que estos sistemas impactan significativamente la autonomía.
Hay que estar listos para cualquier sorpresa al manejar un auto eléctrico
Lleva lo necesario para imprevistos
Prepara un kit que incluya cables de carga compatibles, adaptadores, cargador portátil si tienes, mapas offline, cargadores de teléfono, agua, snacks, herramientas básicas. También es útil prever alojamientos que cuenten con estaciones de carga si pernoctarás en el trayecto.
Modera los efectos del clima y del terreno
El clima extremo, ya sea frío o calor, puede reducir la autonomía de la batería. Si tu auto lo permite, precalienta o acondiciona la batería mientras está enchufado antes de arrancar. Además, terrenos con muchas subidas, viento fuerte o alta altitud demandan más energía, así que considera estos elementos al planear las paradas de carga.
