Como fabricante de automóviles de lujo, Audi ha mantenido un compromiso inquebrantable con los estándares de seguridad más rigurosos que establecen las normativas internacionales. Además de incorporar tecnologías y sistemas de última generación en sus vehículos, la marca se ha destacado por desarrollar carrocerías y chasis altamente resistentes a impactos, con el objetivo primordial de alcanzar los más altos niveles de seguridad para sus conductores y pasajeros.
Pero, para garantizar la eficacia de sus modelos en situaciones de choque y verificar que se cumplen tanto sus propios estándares como los de los organismos reguladores, Audi ha llevado su compromiso un paso más allá. La compañía ha establecido el "Centro de Seguridad de Vehículos" en sus instalaciones en Ingolstadt, un complejo de última generación dedicado a pruebas de choque y seguridad vehicular.
Audi cuenta con este Centro de Seguridad que tiene estos elementos
Entre las impresionantes características de este centro se encuentra una pista de 250 metros diseñada para realizar pruebas de colisión, un bloque móvil con un peso de 100 toneladas utilizado para ensayos de impacto y la capacidad de colisionar dos vehículos en un ángulo de 90 grados, lo que permite evaluar una amplia gama de escenarios de accidentes.
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Más de 100 empleados de Audi trabajan en este centro, abarcando todos los escenarios de pruebas relevantes en la actualidad. Estas instalaciones permiten llevar a cabo un mayor número y variedad de pruebas de choque en comparación con las instalaciones previas utilizadas en la planta de Ingolstadt.
Uno de los aspectos más notables del laboratorio es un bloque de 100 toneladas dispuesto en la pista de choque, capaz de moverse y girar para facilitar diversas pruebas de impacto. Esto ofrece una eficacia excepcional en la evaluación de la seguridad integral de los vehículos.
El Centro de Seguridad de Vehículos también incluye un escenario de colisiones que involucra más de 60 maniquíes de pruebas de choque de diferentes tamaños y características, desde un bebé de 18 meses hasta un adulto de 102 kilogramos. Cada maniquí está equipado con hasta 150 sensores para obtener datos precisos durante las pruebas.
Además de evaluar la estructura y tecnología de sus vehículos, estas instalaciones permiten a Audi desarrollar sistemas de seguridad como cinturones y airbags, utilizando maniquíes y bancos de pruebas de componentes.
El proceso de evaluación de seguridad de Audi también se beneficia de simulaciones avanzadas, con decenas de miles de simulaciones de colisión realizadas antes de que se construya el primer prototipo de un vehículo. Para el diseño de la carrocería de un modelo actual, se realizan más de 60,000 cálculos para hasta 100 casos de carga diferentes.