Cada año, una gran cantidad de accidentes en carretera son causados porque el sistema de frenado deja de funcionar mientras el automóvil se encontraba en marcha, una situación lamentable que desagraciadamente ocurre más de lo que nos gustaría, así que si quieres estar preparado en caso de que una situación como esta se presente, te invitamos a que sigas leyendo y conozcas los ‘sí’ y los ‘no’ definitivos en este tipo de situaciones.
SÍ mantener la calma
Sí, sabemos que pedirle a un conductor que se encuentra en una situación de riesgo que mantenga la calma podría sonar ridículo, sin embargo, es de vital importancia. Una persona con la mente clara podrá saber cuál es la decisión adecuada que deberá tomar para salvaguardar su integridad y la de terceros
Te podría interesar
SÍ disminuir la velocidad
No importa si te encuentras en la ciudad o en carretera, el siguiente paso obvio es el de disminuir la velocidad, y lo más viable es hacerlo soltando el pedal del acelerador para que progresivamente la velocidad descienda.
Además de esto, pisar el pedal del freno repetidamente -aunque no funcione- es muy probable que ayude a que el auto se detenga.
SÍ informar a los demás automovilistas
Encender tus intermitentes y usar el claxon permitirá que el resto de los automovilistas que transitan por carretera se den cuenta de que te encuentras en una situación de emergencia.
Informarlos de esta manera evitará que más vehículos se vean involucrados en un accidente.
SÍ orillarse
Localizar una rampa de frenado en la carretera y hacer uso de ella orillándose podría salvarte la vida. Si no sabes cómo ubicarlas, se encuentran en las carreteras del lado derecho y están señalizadas con color rojo.
NO usar el freno de mano
Aunque pudiera parecer una buena idea, el ir a gran velocidad y jalar del freno de mano puede provocar que las llantas derrapen y se pierda el control del vehículo, algo que podría incrementar el riesgo sustancialmente.
En este tipo de situaciones, el freno de mano solamente puede ser utilizado una vez que la velocidad haya descendido para ayudar a que el vehículo haga alto total. Recuerda hacerlo poco a poco para evitar daños mayores a tu auto.
NO apagar el vehículo
Apagar tu automóvil quizás sea la peor de las opciones ante una situación como esta, pues además de dejarte sin alternativa, la dirección del auto se endurecerá y tratar de maniobrar con el vehículo será casi imposible.
Y tú, ¿alguna vez te has quedado sin frenos? ¿cómo reaccionaste en esa situación? Déjanoslo saber en los comentarios.