Varios países de Europa, entre ellos Alemania, España, Francia y Reino Unidos, se han enfrentado en los últimos días a altas temperaturas nunca antes registradas, lo cual ha provocado cientos de pérdidas mortales, así como incendios, caos en aeropuertos y afectaciones en el transporte público.
Respecto a España, el Gobierno confirmó que la ola de calor causó incendios que arrasaron con 70 mil hectáreas de áreas verdes, una cifra que ya dobla la media de los siniestros registrados en el último decenio.
Por su parte, en París, Francia, alcanzaron los 41 grados centígrados de temperatura; al igual que en Reino Unido, donde por primera vez en su historia superó los 40 grados.
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Es "fenómeno adverso que desde los organismos especializados en alertas climatológicas entendían que iba a suceder allá por el año 2050", pero se está "sufriendo ya", explicó hoy la portavoz del ejecutivo de España.
Ola de calor afecta aeropuertos de Europa
Si bien varios aeropuertos han presentado afectaciones en los últimos días, el lunes pasado se compartieron videos del aeropuerto británico de Luton, al norte de Londres, donde aseguran que el asfalto comenzó a derretirse por el calor.
Por tal motivo, este aeropuerto se vio obligado a suspender vuelos, tanto de salida como de llegada, tras los desperfectos causados sobre una parte de la pista por las altas temperaturas.
Después de unas horas de interrupción y trabajos en la pista, que comenzaron en torno a las 15:00 hora local, los vuelos se retomaron sobre las 18:05 horas, según informó el aeródromo.
"Tras las altas temperaturas de hoy, se identificó un defecto en la superficie de la pista", dijo el aeropuerto en un comunicado, antes de actualizar con la reapertura del servicio una vez subsanado el problema.
Otro aeropuerto con problemas es el de Ámsterdam, que es el tercero más transitado en la región respecto al tráfico internacional de pasajeros, pues desde mayo es uno de los puntos más caóticos de Europa, lo cual se ha acentuado con la ola de calor de estos últimos días.
Además, también en Londres, varias líneas de Metro fueron suspendidas por problemas en las vías y la mayoría de compañías ferroviarias están operando servicios reducidos en muchos de sus trayectos causados por las altas temperaturas.
La ola de calor, que además ya ha cobrado cientos de vidas en estos países de Europa, se podría prolongar dos semanas más, según información de las autoridades españolas.