Para cuidar de tu auto, resulta importante que sepas leer los símbolos y códigos de tus llantas, pues estas son una pieza vital de tu vehículo y si no se cuidan, puede peligrar la seguridad del conductor y de los pasajeros, es por eso que en De Cero a 100 te decimos la manera de realizar correctamente esta lectura.
¿Qué significan los números y letras en las llantas?
Si te fijas en los costados de tus llantas, notarás una serie de números y letras. Estos datos nos proporcionan información sobre sus dimensiones, capacidad de carga y velocidad, entre otros aspectos.
Elementos principales:
• Ancho de la llanta: El primer número representa el ancho de la llanta en milímetros. Por ejemplo, en una llanta con la inscripción "205/55R16", el ancho sería de 205 mm.
• Relación de aspecto: Después de la barra diagonal, encontramos la altura del perfil de la llanta expresada como porcentaje de su ancho.
• Tipo de construcción: La letra "R" indica que es una llanta radial, la más común en la actualidad.
• Diámetro del rin: Se expresa en pulgadas y determina el tamaño del rin compatible con la llanta.
• Índice de carga y código de velocidad: Nos indica la capacidad de carga y la velocidad máxima recomendada.
Otros símbolos importantes en las llantas
Además de los códigos numéricos, existen otros símbolos importantes que pueden ayudarnos a conocer mejor las características de nuestras llantas:
• Fecha de fabricación: Se representa con cuatro números dentro de un óvalo. Los dos primeros indican la semana y los dos últimos el año de producción.
• Marcaciones de tracción y temperatura: Estos te informan sobre el desempeño de la llanta en diferentes condiciones climáticas.
• Composición y materiales: Señala los compuestos de caucho y refuerzos utilizados en su fabricación.
Consejos para el mantenimiento de tus llantas
Saber leer los códigos de tus llantas es sólo el primer paso. Ahora, para garantizar un mejor rendimiento y seguridad de las mismas, te recomendamos seguir estos consejos de mantenimiento:
• Verifica la presión de aire regularmente: Una presión inadecuada puede afectar el consumo de combustible y la durabilidad de la llanta.
• Revisa el desgaste: Si la profundidad del dibujo es menor a 1.6 mm, es momento de cambiarla.
• Evita golpes y baches: Ten siempre presente que los impactos fuertes pueden causar daños internos que afectan la seguridad y la calidad de tu conducción.
• Rota tus llantas cada 10,000 km: Esto ayuda a que el desgaste sea uniforme y prolonga su vida útil.
Ahora, ya lo sabes, cuida de tus llantas para que cuide tu auto de ti.
