Durante la temporada de lluvias, uno de los problemas más molestos y costosos es la filtración de agua al interior del vehículo. Ya sea por sellos deteriorados, desagües tapados o ventanas mal cerradas, la humedad dentro del auto puede generar moho, malos olores, fallas eléctricas e incluso dañar la tapicería. A continuación, te damos consejos prácticos para prevenir este inconveniente.
Prevenir la entrada de agua al interior del auto es clave para conservar tu vehículo en buen estado durante los días de lluvia. Una revisión periódica de sellos, gomas y drenajes puede ahorrarte costosas reparaciones en el futuro.
Elementos que debes checar para evitar filtraciones
Revisa los sellos de puertas, cajuela y ventanas
Los burletes de goma que rodean puertas y ventanas pueden endurecerse o agrietarse con el paso del tiempo. Si notas filtraciones, ruidos de viento o humedad cerca de ellos, es probable que necesiten ser reemplazados. Aplicar un sellador de silicona automotriz también puede ayudar como medida temporal.
Limpia los canales de drenaje del techo solar y parabrisas
Muchos autos modernos tienen drenajes ocultos que canalizan el agua del techo solar o del parabrisas hacia el suelo. Si se obstruyen con hojas, tierra o suciedad, el agua puede filtrarse hacia el interior. Verifica que estos conductos estén libres y realiza limpieza periódica con aire comprimido o un cable delgado.

Verifica el estado de las gomas de las ventanas
Asegúrate de que las ventanas cierren correctamente y que las gomas laterales no estén sueltas o rotas. Según el sitio especializado Roshfrans, una ligera desalineación puede permitir que el agua escurra hacia el interior, especialmente cuando el auto está en movimiento.
Inspecciona el área del maletero y el piso
Después de una lluvia fuerte, revisa si hay humedad o charcos en la cajuela o bajo los tapetes. Esto puede indicar filtraciones no visibles. Actuar rápido evita la formación de hongos o el deterioro de componentes eléctricos.
Evita estacionarte en lugares propensos a inundaciones
De acuerdo con Protección Civil de la Ciudad de México, estacionar en zonas bajas, al lado de banquetas o cerca de coladeras tapadas incrementa el riesgo de que el agua suba y entre por puertas o escapes de ventilación. Siempre elige lugares elevados o bien drenados.