Oasis está a días de presentarse de nuevo en la CDMX, y previo a los dos conciertos que la banda ofrecerá en el Estadio GNP Seguros, recordamos el momento en que los hermanos Gallagher y compañía hundieron un lujoso Rolls-Royce para crear una portada memorable.
Después de dos exitosos álbumes, Oasis se preparaba para el lanzamiento de su tercer álbum de estudio, "Be here now", donde más que mostrarse como referentes de la cultura pop británica, los Gallagher y compañía querían mostrar su estilo de vida extravagante no solo en la música, sino también en lo visual.
El Rolls-Royce que hundieron los Gallagher en una alberca
Para hacer realidad lo que tenían en mente, Liam y Noel Gallagher decidieron que parte de la portada sería protagonizada por un elegante Rolls-Royce Silver Shadow modelo 1973, que fue sumergido en una alberca de Hertfordshire, Londres.
En la portada también posan los integrantes de la banda junto a una Vespa, además de un fonógrafo que se asemeja a un Grammy, por lo que, en conjunción, Oasis presumía el estilo de vida que la fama les permitió, sin dejar de lado la rebeldía que los caracterizaba, al ser los referentes del rock en la década de los 90.
En una ocasión, Michael Spencer Jones, fotógrafo que capturó la legendaria imagen, reveló que el Rolls-Royce estaba destinado al deshuesadero ya que ni siquiera tenía motor, por lo que el equipo de la banda lo compró por 1,000 libras.
El fotógrafo recordó que el buen estado del Rolls-Royce facilitó la sesión, por lo que la única adaptación que se le realizó fue colocarle la matrícula de una camioneta de la policía: SYO 724F, que ahora es todo un referente para los seguidores de la banda.
El Rolls-Royce fue sumergido en la alberca, Spencer hizo su trabajo y el resultado fue una de las portadas más memorables en la historia del rock.
