Decidir entre comprar un auto nuevo o uno seminuevo es una decisión importante que implica valorar tanto el dinero que quieres o puedes invertir, así como que es lo más práctico para ti. Una vez dicho lo anterior, te presentamos las ventajas y desventajas de cada alternativa, para que así puedas tomar la que consideres tu mejor opción.
Las ventajas de ir a una agencia por un auto nuevo son las siguientes:
- Garantía completa: los autos nuevos traen garantía de fábrica, lo que cubre fallas mecánicas o defectos de fabricación durante varios años o hasta cierto kilometraje.
- Tecnología, seguridad y equipamiento moderno: modelos recientes tienen dispositivos de seguridad (como frenos ABS, bolsas de aire, asistencias electrónicas), mejores consumos de combustible, conectividad y otras comodidades.
- Menor desgaste inicial y mantenimiento más bajo al comienzo: al comprarse nuevo, no tiene historia de uso, por lo que es menos probable que requiera reparaciones inesperadas pronto.
- Personalización: puedes elegir color, versión, accesorios, equipamiento conforme a tus gustos.
Pero no todo es bueno, ya que hacerlo presenta las siguientes desventajas:
- Depreciación acelerada: un auto nuevo puede perder entre un 20% y 30% de su valor en el primer año, lo que significa una importante pérdida si planeas venderlo pronto.
- Precio inicial elevado y costos asociados: el precio de compra es más alto, los seguros suelen costar más, los impuestos, verificaciones o tenencia, así como gastos de matrícula y servicios dentro de agencia para conservar garantía.
- Espera o disponibilidad: en ocasiones no está inmediatamente disponible el color o versión deseada, y puede haber tiempos de entrega o esperas.

El mercado de los autos seminuevos
Según el informe de Kavak mencionado en Mexico Business News, en México ha crecido notablemente el mercado de autos seminuevos ante el alza de precios de los autos nuevos, ya que muchos compradores buscan opciones más accesibles. Aunado a ello, hacerlo te brinda estas ventajas:
- Costo más bajo: usualmente puedes conseguir un vehículo reciente por mucho menos que uno nuevo, lo que permite acceder a mejores versiones o marcas que de otra manera serían inaccesibles.
- Depreciación menor: al comprar un auto seminuevo, evitas la parte más fuerte de la depreciación, que ocurre principalmente en los primeros 12-24 meses.
- Variedad de opciones: puedes elegir modelos variados, versiones de lujo o bien equipados, autos de distintos años, marcas, con distintos kilometrajes, etc.
- Costos más bajos de seguros y tenencia: dado que el valor de compraventa es menor, los impuestos y seguros también suelen ser más accesibles.
No obstante, se presentan los siguientes riesgos:
- Historial desconocido o riesgos ocultos: pueden existir daños previos, accidentes, fallas mecánicas no visibles, kilometraje alterado, o que no esté al día en verificaciones, tenencias o pagos.
- Menor garantía: en general, la garantía ya pasó o es limitada; los repuestos pueden ser más difíciles de conseguir, y algunos servicios serán responsabilidad del dueño.
- Mayor mantenimiento a medio plazo: dependiendo del uso anterior, puede que requiera reparaciones más frecuentes, cambios de piezas, más cuidados o protección.