Cualquiera que haya querido comprar un auto recientemente, y que hubiera comprado uno con anterioridad, se ha percatado de este hecho: los autos han subido brutalmente de precio.
Las razones de esta subida son variadas, y podrían achacarse a cuestiones coyunturales como la inflación y la crisis de energías que se vive en Europa.
Pero la realidad es más compleja que eso, y más bien se debe a que los autos como tal se han transformado sobremanera en los últimos 30 años, pero sobre todo en los últimos 10, cuando las Tecnologías de la Información comenzaron a transformarlo todo.
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Todavía en el 2000 era impensable que un auto tuviera red 5G, o sistemas de conducción autónoma.
Qué decimos el 2000, en el 2010 la digitalización no se había extendido ni expandido tanto como ahora. De hecho, sólo dos años antes, en el 2008, fue cuando surgió el primer smartphone de la historia: el HTC Dream.
¿Qué fue lo que aumentó tanto el precio de los autos?
Fue precisamente esta explosión de la tecnología digital y la inclusión de “sistemas inteligentes” lo que realmente catapultó el precio de los vehículos.
La explosión de los smartphones y de la conectividad en general impulsó la necesidad de incluir este tipo de capacidades en los autos.
Especialmente por los problemas de seguridad que implican, ya que 7 de cada 10 personas utiliza su teléfono inteligente mientras manejan.
De esta manera, alrededor de 2015 inició una verdadera revolución en los automóviles: Google lanzó su primer sistema operativo Android Auto; un año antes había surgido también la primera versión del Apple CarPlay.
Estas capacidades en los automóviles significaron la inclusión de pantallas táctiles, microchips, procesadores de información, sensores y antenas wifi que otrora los autos no tenían.
En la medida en que estos sistemas se hicieron más complejos y más caros, los autos también comenzaron a subir su precio.
Hablando empíricamente, hasta antes de 2015 un auto compacto en México podía no rebasar los 100,000 pesos de costo.
Ahora el auto de la menor gama posible no baja de $200,000. El Nissan March, por ejemplo, el auto más barato de Nissan, tiene un costo inicial de $245,900 pesos.
Desde luego, el Nissan March 2022 es compatible con Android Auto y Apple CarPlay.
También tiene varios sistemas electrónicos de seguridad, como el Nissan Connect Finder, un servicio de telemetría que permite, a través de un localizador GPS, permite a los conductores interactuar con su app del vehículo vía remota.
Entre las capacidades de este sistema se encuentran la localización en tiempo real, detección de movimiento y varios otros asistentes virtuales.
Por este tipo de capacidades de telemática inteligente es que los autos han subido tanto de precio.
Finalmente, mientras mayores sean las capacidades del auto en este sentido, mayor será su costo, pero también mayores serán los tiempos de entrega, ya que los autos más equipados llevan más sensores y microcomponentes que hacen de su producción un proceso mucho más complejo de lo que era en 2013 o antes.