Cuernavaca es un pueblo mágico que se caracteriza por su excelente clima cálido y que cuenta con gran cercanía a la Ciudad de México, por ello, no es de extrañarse que sobre todo los fines de semana sea un destino soñado por muchos citadinos como recurso para salir de lo cotidiano de la ciudad, sin embargo, aunque la distancia es corta no se caracteriza por ser la carrera más sencilla de transitar y menos por su famosa curva 'La Pera'.
El terreno geográfico de México es muy diverso, de ahí que cuente con carreteras de todo tipo y con características que las hacen más sencillas o complejas de transitar, en el caso de la México-Cuernavaca se encuentra 'La Pera', curva conocida por su peligrosidad y que se encuentra a 19 kilómetros de la Alcaldía Tlalpan, pero que ya corresponde al espacio del Estado de Morelos.
¿Cuál es el origen del nombre de La Pera?
Su construcción se remonta al año 1952, cuando se buscó construir un camino que uniera la Ciudad de México con el Estado de Morelos, sin embargo, su creación resultó ser un gran reto para los ingenieros, pues entre estos dos puntos existe una diferencia de altitud de mil metros sobre el nivel del mar, así que fue inevitable tener que contar con una curva tan cerrada y con una gran pendiente.
Te podría interesar
Resulta curioso destacar que el nombre de la famosa curva proviene de la palabra 'peralte' que es un término muy utilizado en temas de ingeniería y que se utiliza para referirse a una pendiente transversal, tal es el caso de este tramo de la carretera, sin embargo, parece muy coincidente que si se ve desde arriba dicho trazo tiene la forma de una pera.
¿Por qué La Pera es considerada la curva más peligrosa de México?
De acuerdo a datos oficiales la carretera México-Cuernavaca es una de las mas transitadas del país, lo que hace que la afluencia de autos en la misma sea mucha, y al ser una distancia corta entre ambos puntos muchos conductores suelen transitarla a altas velocidades, pero es eso lo que incrementa de forma dramática la cantidad de accidentes.
Si se logra apreciar la carretera desde un plano cenital, es posible notar que al transitar por la curva, los automóviles dan un giro de 180 grados, es decir, dan un giro casi de un medio circulo para poder retomar de nuevo la carretera, es esa característica la que explica lo cerrado de la curva, por lo cual es necesario trasladarse a velocidades bajas para evitar salir del camino, además es importante mencionar que todo esto sucede mientras los autos se enfrentan a una pendiente continua.
Ya con un poco de contexto de su historia y su alto grado de peligrosidad, es de suma importancia que los conductores la tomen con mucho respeto y con velocidades que les permitan conservar el camino hasta su destino.