¿Alguna vez has notado cómo los faros de tu auto pierden su brillo con el tiempo? No estás solo. Este es un problema común que afecta a muchos vehículos modernos. Pero, existe un viejo truco que puede devolverles su brillo original?.
Los faros de los autos modernos suelen volverse opacos con el tiempo. Esto se debe a que las lentes exteriores ya no son de vidrio, sino de plásticos duros (policarbonatos plásticos) que eventualmente pierden su transparencia.
La exposición constante a los elementos y a los rayos UV del sol puede causar que estos plásticos se decoloren y se vuelvan opacos.
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La opacidad de los faros puede disminuir drásticamente la visión nocturna. Esto se debe a que el haz de luz emitido por el foco no atraviesa una superficie opaca de manera eficiente.
Como resultado, la visibilidad se reduce, lo que puede aumentar el riesgo de accidentes en la carretera.
¿Cómo se puede restaurar la claridad de los faros?
Aquí es donde entra en juego nuestro viejo truco. Se puede utilizar bicarbonato de sodio para eliminar las manchas y el amarilleo de los faros, devolviéndoles su aspecto original.
Al mezclar bicarbonato de sodio con agua o limón y aplicarlo sobre los faros con un paño suave, es posible eliminar la suciedad y restaurar su brillo original de manera efectiva y sin dañar la superficie.
Este truco es una solución efectiva y económica para el mantenimiento de los faros.
Sin embargo, siempre es recomendable consultar a un profesional si tienes dudas sobre el cuidado de tu vehículo.