El motor es una parte indispensable para un vehículo, básicamente no podría funcionar si no cuenta con uno ellos, sin embargo, las características del bloque es un factor en la decisión de compra de un auto nuevo.
Actualmente, en el mercado, sean vehículos subcompactos o compactos, hay modelos que son de 4 cilindros y pueden llevar una cilindrada de 1.6 o 2.0 litros. En casos más especializados, se lleva una sobrealimentación como un turbo, pero eso es en modelos más elevados de costo y donde se busca un poco de más desempeño, por lo que la gasolina y el rendimiento de combustible como tal no debería ser una preocupación.
Los motores naturalmente aspirados de 1.6 litros y de 2.0 litros se encuentran en diferentes vehículos, sin embargo, cada uno de ellos tiene sus pros y contras, así como en qué vehículos están en tamaño.
Te podría interesar
1.6 vs 2.0 litros, ¿qué motorización es mejor?
La respuesta de esta pregunta depende más del tamaño y peso del vehículo, ya que si se trata de un subcompacto lo ideal es que sí sea un 4 cilindros de 1.6 litros, esto para que con una potencia que sea un poco más grande 110 caballos de fuerza sí de buenas cifras de rendimiento, aparte un poco de desempeño cuando se tenga que rebasar en carretera.
Por ello, el 1.6 litros está en vehículos subcompactos de entrada, como hatchbacks, SUVs y sedanes pequeños.
Por otra parte, el 2.0 litros está más presente en modelos compactos, como un sedán o igual camioneta, en potencía sí pueden dar algo cercano a los 150 caballos de fuerza aunque eso sí, por el tamaño del vehículo sí tendrá un peor rendimiento, sin embargo, se mueven bien.
Debido a lo anterior, cada motor depende, y por ello, si quieres algo que ahorre gasolina, ve por uno que sea más ligero y de menor tamaño de motor. Si deseas algo versátil, el 2.0 litros lo hará adecuadamente.