De Cero a 100 fue invitado a la planta de JAC en Ciudad Sahagún, en el estado de Hidalgo, y en un tour especializado en las baterías de esta marca china, con el Ingeniero Junior de Vehículos Eléctricos Vázquez, Ulises Molina, Director posventa de JAC México y José Luis Gutiérrez, Gerente nacional posventa.
¿Qué hábitos comunes podrían dañar la batería de tu auto eléctrico?
De acuerdo a uno de los factores más comunes que afecta la vida útil de las baterías es la forma en que se realiza la carga. Si no se carga correctamente, las celdas pueden desbalancearse.
“Recomendamos que, al menos cada quince días, el vehículo se cargue al 100%. Ese último tramo de carga, del 93% al 100%, es clave porque es cuando comienza el proceso de balanceo de los módulos”, explicaron los especialistas. “Del 30 al 95%, la carga es relativamente rápida, pero del 95 al 100% se hace más lenta precisamente porque es cuando el sistema comienza a balancear las celdas, algo similar a lo que pasa con un teléfono celular”.
Otro punto a considerar es el uso excesivo de cargas rápidas. Aunque no están prohibidas, se sugiere que se utilicen de forma esporádica y que se priorice el uso de carga lenta, como la que se puede realizar con el cargador que viene con el vehículo. Esto permite una carga más uniforme y saludable.
“Cuando se usa carga rápida continuamente, se corre el riesgo de que queden ‘espacios’ sin carga en las celdas, como si quedaran burbujas de aire. Esto puede hacer que el sistema marque un nivel bajo de batería, aunque en realidad sea un desbalanceo interno”, explicaron.
El desuso prolongado también es un factor de riesgo. Si el auto permanece sin usarse ni cargarse durante tres o cuatro meses, es probable que las baterías se desbalanceen, como ocurre con un celular que se descarga solo con el tiempo.
“Algunos clientes compran estos vehículos como juguete. Los usan durante el primer mes y luego solo los domingos. Ese tipo de uso intermitente también contribuye a una mala gestión de la batería”.
Por ello, la recomendación general es mantener una rutina de carga completa periódica, usar carga lenta como principal método y evitar dejar el vehículo inactivo por periodos largos.
