Este fin de semana la Fórmula E dio inicio a su novena temporada en las instalaciones del Autódromo Hermanos Rodriguez en la Ciudad de México, demostrando una vez más que el futuro del automovilismo se perfila hacia la electrificación. Desde muy temprano los primeros fanáticos de las carreras se dieron cita en el trazado mexicano para disfrutar de diferentes actividades, a pesar de las bajas temperaturas que se registraron esta mañana.
Pequeños y grandes lucían orgullosos los cascos de cartón en color azul que la organización de Fórmula E les regaló al llegar; por supuesto la “E” distintiva se llevó el protagonismo.
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Los asistentes disfrutaron desde la cabina interactiva de ABB, Patrocinador oficial de Cargadores Eléctricos de Fórmula E, los juegos de realidad virtual de DHL y el simulador de Nissan en el que pusieron a prueba sus habilidades al volante.
Por supuesto, también se habilitó un área especial para niños, en la que los pequeños del hogar pudieron disfrutar de actividades de acuerdo a su edad: pinta macetas, activación de LEGO y una pared para escalar y disfrutar de un día lleno de adrenalina.
Como era de esperarse los amantes del automovilismo encontraron diferentes estaciones de comida rápida y bebidas para acompañar una tarde llena de emociones.
Para los organizadores iniciar el calendario de Fórmula E en México es un verdadero gusto, pues la afición mexicana ha demostrado ser una de las más apasionadas del mundo: “México es apasionado, sobretodo en el deporte motor, queríamos sentir eso [al inicio de la temporada]”, aseguraron en conferencia de prensa.
Fórmula E en México: un deporte para TODOS
A diferencia de otras categorías como la Fórmula 1, parece ser que en la Fórmula E hay espacio para que hombres y mujeres de todas las edades disfruten del automovilismo, y que al mismo tiempo entiendan la importancia del cuidado del medio ambiente.
Durante el desarrollo de la Fórmula E en la Ciudad de México, se tomaron diferentes acciones para disminuir el impacto negativo en el planeta, instalando bebederos y estaciones de recolección para separar la basura según su tipo.
No cabe duda que este campeonato estuvo lleno de emociones y mucho aprendizaje para los amantes del automovilismo, además de que como siempre, la afición mexicana demostró una vez más que es la más ferviente del mundo.