En la Fórmula 1, los neumáticos son uno de los elementos más estratégicos y determinantes en el rendimiento de un monoplaza. Cada temporada, la empresa italiana Pirelli, proveedora oficial desde 2011, suministra tres tipos de compuestos principales: duros, medios y blandos, los cuales se diferencian por su nivel de agarre, durabilidad y temperatura de funcionamiento. Comprender sus características es esencial para entender las estrategias de carrera.
De acuerdo con Pirelli Motorsport, los compuestos se clasifican mediante un código de colores: blanco para los duros (C1-C2), amarillo para los medios (C2-C3) y rojo para los blandos (C3-C5), siendo el número menor el compuesto más resistente y el mayor el más rápido, pero menos duradero. Esta escala permite adaptar las opciones a las condiciones de cada circuito.
Características de los tipos de neumáticos
El neumático duro es el más resistente y está diseñado para soportar altas temperaturas y largas distancias. Su ventaja principal es la durabilidad: puede completar más vueltas antes de degradarse, pero ofrece menos agarre y necesita más tiempo para alcanzar su temperatura óptima. Por eso, suele ser ideal en circuitos abrasivos o en carreras calurosas como el Gran Premio de España o Bahréin.
Por su parte, el compuesto medio representa un equilibrio entre duración y rendimiento. Es el más versátil y, por lo tanto, el más utilizado durante las carreras. Se calienta con mayor rapidez que el duro y ofrece un agarre intermedio, lo que permite estrategias mixtas que combinan velocidad y eficiencia.
Finalmente, el neumático blando proporciona el máximo agarre y rendimiento en curva, lo que se traduce en los mejores tiempos por vuelta. Sin embargo, su desgaste es mucho mayor, especialmente en condiciones de calor o con carga aerodinámica alta. Este tipo de compuesto se utiliza comúnmente en clasificación o en fases finales de carrera donde se busca aprovechar cada décima de segundo.
Los equipos deben usar al menos dos tipos diferentes de compuestos secos durante una carrera, si las condiciones climáticas lo permiten. Esta norma fomenta la variedad de estrategias y añade un componente táctico al espectáculo.
