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Circular con parabrisas dañado: Qué dice el reglamento de tránsito en la Ciudad de México

Si el parabrisas de tu auto presenta daños que puedan afectar la visibilidad, te sugerimos repararlo lo más pronto posible para evitar multas.

Circular con parabrisas dañado: Qué dice el reglamento de tránsito en la Ciudad de México
Circular con parabrisas dañado: Qué dice el reglamento de tránsito en la Ciudad de México Las sanciones varían en cada estado. Foto: Especial.

El parabrisas no es solo un componente estético, cumple funciones esenciales en la integridad estructural del vehículo y la protección de quien conduce y de los pasajeros. Por ello, circular con uno agrietado, astillado o con daños que afecten la visibilidad es una práctica peligrosa y que es sancionada en la Ciudad de México y el resto del país.

El Reglamento de Tránsito de la CDMX incluye disposiciones claras que obligan a los conductores a mantener su vehículo en condiciones que aseguren la visibilidad y seguridad al circular. El Artículo 40, fracción II señala que todo vehículo motorizado debe contar con ciertos elementos que garanticen la conducción segura; entre ellos se menciona expresamente que debe tener un parabrisas en buen estado. 

Cuando el parabrisas presenta grietas, astillamientos, fracturas o cualquier daño que comprometa la visibilidad, tanto interior como exterior, el vehículo no cumple con ese requisito básico de seguridad, lo que lo hace susceptible de sanción.

Si un oficial detecta que el parabrisas del auto no cumple con los estándares de visibilidad, el conductor puede recibir una multa equivalente a 5, 7 o 10 veces la Unidad de Medida y Actualización (UMA) vigente. Para 2025, la UMA tiene un valor de $113.14 pesos, por lo tanto, la multa podría situarse entre aproximadamente 565.70 y 1,131.40 pesos.

¿Por qué se multa a los autos con parabrisas dañado?

El objetivo de las normas es prevenir accidentes. Un parabrisas dañado puede:

  • Dificultar la visibilidad del conductor, sobre todo en condiciones de lluvia, contraluz o de noche.
  • Comprometer la integridad estructural del vehículo en caso de impacto, pues el cristal tiene un papel de refuerzo.
  • Hacer que fragmentos se desprendan o generen astillas que causen lesiones.

Por ello, las leyes de tránsito consideran estos daños no sólo una violación formal, sino una amenaza a la seguridad vial.

Cada estado o municipio puede definir sanciones distintas: el monto, los rangos o si aplica retención del vehículo. Por ello, es importante revisar el reglamento de tránsito aplicable en tu estado o municipio para conocer el monto exacto, si existe tolerancia o plazos para reparar el daño sin sanción adicional.

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