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Gasolina de bajo octanaje: cómo afecta al motor de tu auto

Para evitar los daños en el motor, se recomienda revisar el manual del auto y así conocer cuál octanaje usar.

Gasolina de bajo octanaje: cómo afecta al motor de tu auto
Gasolina de bajo octanaje: cómo afecta al motor de tu auto Debes usar la adecuada para evitar daños en el motor. Foto: Especial.

El tipo de gasolina que utilizas en tu auto no solo influye en su rendimiento, sino también en su durabilidad. Muchos conductores en México optan por combustibles de menor octanaje, como la Magna (87 octanos), por su menor precio. Sin embargo, usar una con un índice de octano inferior al recomendado por el fabricante puede causar daños graduales y costosos al motor.

El octanaje mide la capacidad del combustible para resistir la detonación prematura dentro del motor. Según explica Petróleos Mexicanos (Pemex), un octanaje más alto evita que la mezcla de aire y gasolina explote antes de que la chispa de la bujía la encienda. Cuando se usa un combustible con octanaje más bajo del necesario, se produce lo que se conoce como “golpeteo” o “knocking”, un fenómeno que genera vibraciones, pérdida de potencia y desgaste acelerado de las piezas internas.

Dicha detonación puede dañar componentes esenciales como pistones, válvulas y bujías. Aunque los autos modernos cuentan con sensores que ajustan automáticamente la combustión para reducir los efectos del golpeteo, hacerlo constantemente afecta el rendimiento del motor y aumenta el consumo de combustible. En algunos casos, también puede provocar fallos en el sistema de encendido o en el convertidor catalítico.

Algunos autos pueden usar gasolina de bajo octanaje sin problemas

Cabe destacar que, no todos los vehículos requieren gasolina Premium (91 octanos o más). Los motores diseñados para funcionar con gasolina regular pueden operar sin problema con ese tipo de combustible. Sin embargo, aquellos con motores turbo, de alta compresión o deportivos necesitan gasolina de mayor octanaje para alcanzar su máximo desempeño sin riesgo de daño. Por ello, los fabricantes especifican en el manual del propietario qué tipo de gasolina debe utilizarse.

Además del tipo de combustible, su calidad también influye. La Profeco ha detectado en verificaciones a estaciones de servicio que algunas despachan litros incompletos o combustibles adulterados, lo cual agrava los problemas de rendimiento. Se recomienda cargar siempre en gasolineras confiables y conservar los comprobantes de compra en caso de reclamaciones.

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