El freno de mano, también conocido como freno de estacionamiento, es un sistema de seguridad que evita que el auto se mueva cuando está detenido. Aunque su uso parece sencillo, muchas personas lo emplean de forma incorrecta, lo cual puede provocar desgaste prematuro o incluso accidentes. Conocer cuándo y cómo usarlo correctamente es fundamental para alargar su vida útil y garantizar la seguridad.
De acuerdo con AutoZone, el freno de mano actúa sobre las ruedas traseras y se activa de forma mecánica (por medio de una palanca) o electrónica (en coches modernos mediante un botón). Su función principal es mantener el auto inmovilizado al estacionarlo, especialmente en superficies inclinadas. Usarlo correctamente evita que el vehículo ruede accidentalmente.
Una práctica correcta es activarlo cada vez que se estaciona el auto, sin importar si el terreno es plano o con pendiente. Esto ayuda a reducir el esfuerzo sobre la transmisión, en especial en vehículos automáticos. Se recomienda primero poner el vehículo en "P" (automático) o en velocidad (manual), y luego accionar el freno de mano. Al arrancar nuevamente, se debe desactivar el freno antes de acelerar, para evitar desgaste.
En autos con transmisión manual, Michelin aconseja combinar el freno de mano con una marcha engranada al estacionarse en pendiente: primera velocidad si se está cuesta arriba y reversa si es cuesta abajo. Esto añade una capa extra de seguridad en caso de que falle el freno.
Quita el freno de mano por completo antes de arrancar
También es importante evitar circular con el freno de mano activado, ya que esto puede generar un calentamiento excesivo en los frenos traseros, pérdida de eficacia y desgaste innecesario de los componentes. Algunos carros más recientes emiten una alerta si esto ocurre, pero en modelos más antiguos es responsabilidad del conductor revisarlo.
Por último, si el freno de mano no mantiene el auto detenido o se siente flojo, podría necesitar ajuste o reparación. Usarlo correctamente no solo contribuye a la seguridad del vehículo, sino que también previene daños costosos a largo plazo.
