Bridgestone se encuentra en medio de una transformación importante, y el guayule, una nueva clase de caucho, será clave en esa transformación, ya que habrá de redefinir lo que es la llanta como objeto, y transformará su futuro en medio de un nuevo mercado.
La compañía mantiene el objetivo de ser una empresa nula en su huella de carbono para 2050, y tener el 100% de sus productos hechos a partir de materiales renovables también para ese año.
En este sentido, la compañía ha invertido hasta $250 millones de dólares en la transformación de sus procesos productivos.
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Una buena parte de estas inversiones se han concentrado en la producción de guayule, un material diferente al caucho convencional y cuya huella ambiental es mucho menor.
De forma particular, la compañía ha invertido hasta $42 millones de dólares en el diseño y producción de este tipo de ‘llanta verde’ hecha de guayule.
¿Qué es el guayule?
El guayule es una planta que produce un tipo especial de resina que constituye un látex natural.
Se trata de una planta milenaria que incluso los aztecas utilizaban para diversos objetivos. Ante la invención de la vulcanización en 1839, sin embargo, la producción de látex, hule y caucho se centró en otra planta, el árbol del caucho, cuya huella ambiental es mucho mayor.
La carrera por la sostenibilidad en la industria ha empujado a los fabricantes de llantas a identificar materiales menos contaminantes que el caucho producido a base de la transformación de hidrocarburos.
Es aquí donde entra el guayule. La planta crece en estados del norte de México, y en varios de Estados Unidos como Arizona, Texas y Nuevo México.
Es una planta desértica, por lo que necesita mucho menos agua para desarrollarse que el tradicional árbol del caucho.
En este sentido, Bridgestone ha identificado este material como clave en su estrategia de sostenibilidad.
La compañía mantiene el objetivo de vender llantas de guayule hacia 2030, y para ello ya está haciendo interesantes pruebas con lo que podría ser un producto revolucionario.
La llanta de guayule que ya corrió en la IndyCar
Para cumplir su objetivo, Bridgestone ya hizo importantes pruebas con esta llanta de guayule. Se trata de la primera de la compañía con este material, y lleva por nombre la Firestone Firehawk guayule.
Esta llanta fue protagonista de la INDY 500 Pit Stop Challenge, evento previo a la icónica 500 Millas de Indianápolis, en la que Pato O’Ward, piloto mexicano, quedó en segundo lugar.
Gracias a estas pruebas, Bridgestone ha sido capaz de sacar importantes conclusiones de lo que será el futuro de la llanta, y de las propiedades del guayule para estos efectos.
En este sentido, hacia el inicio de la siguiente década podremos ver los resultados de esta estrategia y conocer la primera llanta de guayule hecha para la producción masiva.