La industria automotriz y las industrias que la rodean, como la de producción de llantas, se encuentra en una transformación profunda; y Bridgestone, la marca llantera más importante del mundo, ha dado inicio también a su propio proceso de transformación.
El día de hoy asistimos a un mercado que se contrae y a una industria que se inclina por la sostenibilidad; de forma específica, a la creación de cadenas de suministro y producción bajas o nulas en carbono.
También a una digitalización profunda de todos los activos industriales y a la de muchos productos de consumo.
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Es precisamente en este sentido que Bridgestone se está transformado: pretende ser una empresa nula en su huella de carbono para 2050, y tener el 100% de sus productos hechos a partir de materiales renovables también para ese año.
En este tenor, Bridgestone ha lanzado de forma global la campaña “Lo que realmente importa” con la que pretende renovar su portafolio y redefinir su nicho de mercado para participar de forma más cercana a sus clientes, especialmente en el mundo digital.
Bridgestone invierte hasta $250 millones en nuevos materiales
La firma japonesa en sus oficinas de la Ciudad de México presentó su campaña global “Lo que realmente importa”, en la que participaron medios de comunicación e influencers.
En la presentación, Bridgestone montó toda una experiencia inmersiva y sensorial para dar a conocer los puntos finos de su campaña, la cual pone un énfasis especial en la seguridad.
En palabras de Mauricio García, director de Marketing para Latinoamérica Norte, la campaña tiene la siguiente intención:
“Estamos buscando ser más que una empresa de llantas: queremos ser una empresa de soluciones de movilidad, y al mismo tiempo ofrecer un impacto positivo en nuestros clientes. Esto lo vamos a lograr a través de un fuerte enfoque en la sostenibilidad y la seguridad”.
Para ello, explicó Alfonso Zendejas, presidente de Bridgestone, la compañía ha invertido hasta $250 millones de dólares en la transformación de los procesos productivos de la planta de la compañía en Morelos.
Una de estas inversiones ha tenido ya un primer resultado: la primera llanta de Bridgestone hecha de guayule, un material de origen natural mucho menos contaminante que el caucho derivado de los hidrocarburos, y que ya corrió en la IndyCar.
Esta llanta es la Firestone Firehawk que estuvo presente durante la INDY 500 Pit Stop Challenge, evento previo a la icónica 500 Millas de Indianápolis, en la que Pato O’Ward, piloto mexicano, quedó en segundo lugar.
Bridgestone, un proveedor confiable y cercano a sus clientes
Además de la Firehawk guayule, Bridgestone ha apostado mucho en el apartado de la seguridad.
En este sentido estará lanzando hasta seis nuevos productos durante el próximo año que son llantas altamente tecnológicas que brindan un performance único, al tiempo que se conectan intrínsecamente con las necesidades específicas de cada conductor. Por ejemplo, si su necesidad es de conducción deportiva o todo terreno.
Finalmente, en esta dirección se encaminó la experiencia inmersiva de la campaña “Lo que realmente importa” que, como dijimos, tiene la misión de conectar a la marca con sus usuarios más allá del objeto (la llanta) para ofrecerles soluciones integrales de movilidad, con un profundo sentido sostenible y de seguridad.
La experiencia estuvo compuesta por una serie de videos con un juego de luces y creación de atmósferas que evocan los momentos más importantes en la vida de las personas: en su trabajo, en sus horas de juego, cuando se desplazan de un punto a otro, o cuando disfrutan un momento para sí mismos como una taza de café.
En todos esos momentos clave, Bridgestone pretende estar cerca de sus clientes: más que como una llanta, como un proveedor de soluciones altamente confiable.