El escándalo por la falsificación de datos sobre emisiones en vehículos Toyota continúa dentro de su marca de camiones ligeros, Hino.
El día de ayer trascendió en medios japoneses que las irregularidades han impactado severamente la producción y entregas del camión ligero Dutro, por lo que Toyota, como empresa matriz, se decepcionó terriblemente de esta vertical de la compañía.
El escándalo de Hino y Toyota
El problema que enfrenta la marca no es menor, a inicios de marzo de este año, el Ministerio de Transporte Japonés descubrió que Hino había estado falsificando datos sobre las emisiones de sus motores al menos desde 2003.
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Las autoridades de Japón culparon a la compañía de priorizar la expansión corporativa y de producción, en vez de la calidad de sus motores en materia de emisiones y eficiencia de combustible.
El escándalo, muy parecido al dieselgate de Volkswagen, alcanza al departamento de ingeniería de la marca y reveló que algunos funcionarios protegieron a los malhechores con prácticas burocráticas.
La afectación inicial alcanzó a 47,000 vehículos fabricados desde abril de 2017. Ahora, se sabe que al menos 76,000 vehículos de Hino serán retirados del mercado, específicamente del modelo de camión ligero Dutro.
Sin embargo, hay otros modelos; el problema está específicamente en un motor diesel de 4.0 litros.
Según Hino, el problema estuvo en que, para los resultados finales sobre emisiones de los motores se tomó en cuenta sólo una metodología de evaluación, mientras que las regulaciones implicaban varias metodologías.
Alegó que todo se debió a un desconocimiento de las regulaciones y no a un problema con dolo. El presidente de Hino, Satoshi Ogiso, dijo al respecto:
“Como fabricante de automóviles, es absolutamente necesario que tengamos un conocimiento profundo de las normas y reglamentos para poder liberar vehículos. Ya he explicado que el error no fue intencional, pero no tengo intención de decir que porque no fue intencional, está bien”.
Toyota revira, y se dice decepcionada
A inicios de este mes se descubrió que eran más los modelos y el número de los vehículos afectados por las malas prácticas.
Hino, como respuesta, estableció un comité de investigación para solucionar el problema y calmar a Toyota por la falsificación de datos adicional.
Sin embargo, Akio Toyoda, director ejecutivo de Toyota, dijo en un comunicado:
“Como empresa matriz y accionista de Hino Motors Ltd., estamos extremadamente decepcionados de que Hino haya traicionado una vez más las expectativas y la confianza de sus accionistas con la revelación de una nueva ronda de irregularidades”.
Comentó como punto final que Hino se encuentra en una situación muy delicada con sus accionistas y que solo le resta ver si puede recuperar la confianza de los mismos. Dijo que “estarían observando de cerca”.
Con todo esto, ¿Hino podría desaparecer en Japón, si no recupera la confianza de sus accionistas?