Un prototipo de Mazda, que podría ser el primer vehículo eléctrico puro de la marca basado en su plataforma de tracción trasera (LPS), fue recientemente capturado en pruebas cerca del centro de investigación y desarrollo de la compañía en California. El avistamiento confirma que Mazda está avanzando en sus planes de electrificación.
El vehículo de prueba, que utiliza una carrocería fuertemente modificada derivada de sus modelos CX-70 o CX-90, sugiere un diseño más compacto y una estética centrada en la aerodinámica eléctrica.
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Aunque el camuflaje es casi nulo, los detalles visibles apuntan a un enfoque diferente al de los actuales crossovers de Mazda. La parte delantera presenta una parrilla completamente cerrada y cortinas de aire bloqueadas, elementos típicos de un vehículo eléctrico puro para mejorar el flujo de aire y la eficiencia.
Los cambios más significativos están detrás del pilar A. El prototipo muestra una distancia entre ejes más corta que el CX-90 y un voladizo trasero notablemente menor. La ventanilla trasera de tres cuartos recuerda al modelo CX-80. Una inspección detallada reveló que, si bien el prototipo es ancho, sus ruedas están inusualmente "metidas hacia adentro".
Esto confirma que el modelo de producción final tendrá un ancho de vías menor que el CX-90, sugiriendo una plataforma dedicada o altamente modificada para la electrificación.
Mazda originalmente planeó lanzar varios vehículos sobre esta plataforma entre 2025 y 2030. Sin embargo, los planes se han retrasado. Ahora, se estima que este nuevo vehículo eléctrico podría hacer su debut mundial en 2027, con su llegada al mercado estadounidense prevista para 2028.
