El simracing, o las carreras de simulación, tienen algunos años volviéndose más y más importantes en el ámbito del automovilismo deportivo; pilotos muy reconocidos como Fernando Alonso han hablado de la importancia del simulador dentro de las actividades (específicamente en el desarrollo de un auto F1), y otros pilotos como Lando Norris y el mismo Max Verstappen son asiduos competidores virtuales.
Si bien desde una perspectiva estrictamente purista puede parecer extraño cómo un simulador, o un “videojuego”, pueden ayudar a una actividad tan técnica y físicamente demandante como una carrera en Le Mans, no lo es así para los protagonistas del deporte.
Unos días atrás hablamos del enfado de Max Verstappen por el fiasco en las 24 Horas de Le Mans virtuales: el neerlandés se preparó durante meses para la más grande carrera de simulación en el mundo, sólo para perderla por errores en el servidor.
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El dos veces campeón del mundo ahondó en las perspectivas del simracing en contraste con su carrera como piloto titular en la Fórmula 1; de acuerdo con Verstappen, sus experiencias en el simracing enriquecen su desempeño como piloto a bordo de una máquina real.
En primera instancia, la ventaja más inmediata del simracing, según Verstappen, es que se compite a bordo de autos que no son de Fórmula 1; que tienen diferentes configuraciones, lo cual amplía su abanico de habilidades.
Verstappen, sobre las bondades del simracing
El dos veces campeón del mundo de Red Bull ha dicho en una entrevista que sus actividades en las carreras de simulación le dejan todo un bagaje de habilidades y conocimientos que puede aprovechar después en una carrera real.
“En las carreras de simulación trabajas con autos muy diferentes a los F1, en términos de su balance, su acelerador, la dirección y las trazadas. Te obliga a aprender de forma constante y adaptarte a lo que tienes para ir lo más rápido posible”.
Max Verstappen añadió que todos estos esfuerzos en el simulador o en una carrera de simulación se convierten en activos de valor en una carrera de F1 real.
“Al final del día, en una carrera de F1, puedes no estar enteramente satisfecho con la configuración del auto. Pero ya tienes ahí toda esa experiencia en el fondo de tu mente, y las puedes aprovechar a tu favor”.
El piloto finalizó diciendo que es por eso que se toma tan en serio las carreras de simulación o simracing, ya que lo que él intenta conseguir es aprender más para crecer como deportista en todos los ámbitos posibles.