Antes y durante el Gran Premio de Bahrein 2024, la noticia ha dejado de ser la del piloto fuera de serie que promete batir todos los récords habidos y por haber, y en su lugar, los titulares han sido ocupados por el espectáculo que se está gestando en el bien llamado, “Gran Circo”.
Desde sus inicios, la Formula 1 ha sido sinónimo de deportividad, glamour y competencia, pero para este 2024, las cosas han cambiado un poco, dejando de lado la acción dentro de la pista, para darle paso a los chismes que rondan dentro y fuera de los equipos. Y para muestra un botón, o varios botones.
Hemos dejado de prestarle atención a la que es considerada como una de las transacciones más importantes de la historia del deporte motor: la llegada de Lewis Hamilton a Ferrari, para dar paso al caso Horner, mismo que hasta el momento sigue siendo una incógnita.
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La falta de claridad de la escudería de las bebidas energéticas en cuanto a las acusaciones al mandamás de Red Bull, Christian Horner, solo han provocado la ira en redes sociales y dentro del garaje del equipo más dominante de la parrilla, de tal manera que muchos medios internacionales aseguran que Jos Verstappen, padre de Max, está listo para sacar a su retoño del equipo, y alejarlo de todo este drama. Toto Wolff entró al chat.
Algunos periodistas más osados, confirman que el ex piloto de F1 protagonizó una pelea con Horner este fin de semana en Bahrein, en la que hubo sombrerazos y sartenazos a causa de un supuesto triángulo amoroso que tiene todo que ver con las acusaciones de comportamiento inapropiado con las que el equipo inició la temporada. ¿Me sorprende? Por supuesto que no, estamos hablando del hombre que dejó a un niño de 14 años a su suerte en una gasolinera luego de perder una carrera. Sí, 14 años.
Por lo pronto, se rumora que el patriarca de la dinastía Verstappen tiene prohibida la entrada al garaje de Red Bull para la siguiente carrera, así que mientras son peras o son manzanas, quizás estemos frente a la única debilidad del equipo austriaco, misma que podría ser la causante de su caída inminente: un llamado ‘lío de faldas’. Ajá quizás exageré un poco, pero la realidad es que de seguir así, la situación no pinta nada bien para los involucrados.
En cuanto a lo ocurrido en Sakhir, considero que no hay nada más para analizar, o probablamente sí, la indiferencia de la escudería del Cavallino Rampante a su segundo piloto, Carlos Sainz, aunque eso definitivamente lo platicaremos en otra ocasión. Fuerza, Smooth Operator.
Este 2024 la función de El Gran Circo apenas está comenzando, así que mientras ‘la poda’ de los jerarcas continúa y el drama se sigue gestando de manera desmedida, nos leemos en la siguiente, cuando la bandera a cuadros vuelva a hondear.
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