Los aviones eléctricos no son dispositivos muy viables en las estrategias de descarbonización de la movilidad aérea: la razón no es muy compleja: necesitan tanta energía, que la batería es demasiado pesada para el avión. De ahí que los combustibles bajos en emisiones, o el hidrógeno, sean las alternativas más obvias para ese camino. Sin embargo, Stellantis y Archer se han unido como socios para traer aviones eléctricos a la realidad, y podrían llegar al mercado en 2024.
Stellantis no es la única compañía que está buscando participar en la nueva aviación sostenible. Rolls-Royce ya probó su primer motor de avión de hidrógeno de forma exitosa, además de pretende ser 100% compatible con combustibles de aviación renovables (SAF, por sus siglas en inglés) este mismo año.
Incluso Petronas y Mercedes Benz F1 han apostado en la materia para que el equipo se desplace en aviones bajos en emisiones carbónicas.
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Pues bien, Stellantis y Archer están por hacer lo propio y pretenden construir un avión eléctrico de nombre Midnight eVOTL que podría revolucionar la movilidad urbana área, e incluso otros rubros.
La compañía de autos aportará una inversión millonaria, además de su conocimiento en procesos de ensamblaje y producción y tecnología, mientras que Archer se encargará del diseño e ingeniería del Midnight eVOTL.
¿Cómo será el avión eléctrico de Stellantis y Archer?
En primera instancia, el Midnight eVOTL será un avión eléctrico ligero, pero con una capacidad de carga de hasta 450 kilos. Esto sería equivalente a cuatro pasajeros y un piloto.
Tendrá una autonomía de hasta 160 kilómetros, y estará optimizado para viajes cortos y consecutivos de hasta 32 kilómetros.
Se trata, pues, de un avión que podría ser útil incluso como taxi aéreo, segmento en el que Volkswagen también se encuentra trabajando.
El tiempo de carga del Midnight eVOTL será de unos 10 minutos, y será sustentable, silencioso y muy seguro.
Como decíamos arriba, Stellantis aportará hasta 150 millones de dólares para su construcción en sus plantas de Georgia, mientras que Archer diseñará el tren motriz y otros componentes del avión eléctrico.
Podría llegar al mercado en 2024, siempre y cuando Archer vaya cumpliendo con ciertas metas empresariales a lo largo del 2023 que, de lograrse, harán de Stellantis el principal socio de Archer a largo plazo, y un jugador clave en la movilidad urbana aérea y los aviones eléctricos.