Las luces direccionales son un componente esencial del sistema de señalización de cualquier vehículo. Su función principal es informar a los demás conductores sobre los giros o cambios de carril que se pretenden realizar, ayudando a prevenir accidentes y a mantener una circulación ordenada. Pero, ¿qué pasa si fallan repentinamente mientras conduces? A continuación, te explicamos cómo actuar ante esta situación.
En primer lugar, es fundamental mantener la calma. Un fallo en las luces direccionales puede representar un riesgo, especialmente en vías rápidas o en zonas de alta congestión, pero es posible manejarlo de forma segura si se toman las medidas adecuadas.
De acuerdo con el Reglamento de Tránsito de la Ciudad de México, lo que se debe hacer es utilizar las señales manuales. Por ejemplo, para indicar un giro a la izquierda, se debe sacar el brazo izquierdo extendido horizontalmente por la ventana. Para un giro a la derecha, se puede doblar el brazo hacia arriba formando un ángulo de 90 grados. Para señalar una reducción de velocidad o una detención, el brazo debe extenderse hacia abajo.

Además de las señales manuales, es importante aumentar la precaución al conducir. Esto implica revisar los espejos constantemente, anticipar tus movimientos con más tiempo de lo habitual y mantener una velocidad moderada. Si es posible, evita cambiar de carril o realizar giros bruscos hasta llegar a un lugar seguro.
¿Cómo conducir sin direccionales durante la noche?
En caso de que la falla ocurra durante la noche o en condiciones de baja visibilidad, la situación se vuelve más delicada. Puedes utilizar las luces intermitentes brevemente para alertar a los demás conductores, pero evita mantenerlas encendidas constantemente si estás en movimiento, ya que estas están destinadas a señalar una detención o avería.
Una vez que te sea posible, detente en un lugar seguro, como una gasolinera o estacionamiento, y revisa el problema. Bridgestone asegura que las luces direccionales suelen fallar debido a un fusible quemado o una bombilla fundida, lo cual puede solucionarse fácilmente si se cuenta con el repuesto. Si el problema persiste, es recomendable llevar el vehículo a revisión mecánica lo antes posible.