La F1 y el automovilismo en general es una disciplina deportiva que en muchas ocasiones suele estar acompañada por fuertes lluvias, neblina u otras complicaciones meteorológicas, sin que estas circunstancias impidan el desarrollo de sus competencias, incluso hay pilotos que se distinguen por aprovechar esto para mostrar lo mejor de sus habilidades y sacar ventaja ante sus rivales.
Sin embargo, hay ocasiones en que los obstáculos del clima son tan intensos que no queda de otra más que la cancelación de las actividades, como ocurrió esta semana con el Gran Premio de Emilia Romagna.
Este episodio es atípico en el mundo del Gran Circo, pero no es algo del todo inédito, pues a lo largo de la historia se han presentado otras carreras que no se pudieron llevar a cabo o no se completaron por motivos similares.
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Gran Premio de Malasia 2009, el diluvio repentino
La competencia en suelo asiático fue histórica para aquel momento en la Fórmula 1. El Gran Premio inició su carrera sin complicaciones y con un clima que parecía ideal, pero cerca de la mitad de la carrera una ligera llovizna causó confusión entre pilotos y equipos.
Ante tal escenario decidieron continuar con la misma pero en unos minutos se
convirtió en una tormenta que provocó problemas en el manejo de los monoplazas, por lo que se suspendió de forma momentánea. La duración de la tempestad fue tal que cuando finalmente la lluvia cedió ya no hubo luz natural para poder continuarla, por lo que con 31 vueltas completadas se canceló de forma definitiva y Jenson Button fue declarado como ganador.
Gran Premio de Bélgica 2021, un gran bochorno para la F1
Uno de los episodios más vergonzosos para la FIA y la Fórmula 1 en toda su historia fue lo sucedido hace tan sólo un par de años en el circuito belga de Spa-Francorchamps.
Previo al inicio de la carrera cayó una fuerte lluvia en el lugar, por lo que los organizadores optaron por aplazar la competencia, pero unas horas más tarde decidieron iniciarla a pesar de que el clima no mejoraba. El Gran Premio duró sólo dos vueltas, una de ellas con safety car, hasta que fue suspendida permanentemente, situación que dejó molestos a todos los participantes.
El colmo fue que gracias a esta 'simulación' de carrera no se reembolsó el dinero invertido a los espectadores, pues en teoría esta sí se había llevado a cabo, aunque sólo otorgó la mitad del puntaje a los 10 primeros lugares.
Gran Premio de Japón sufre otra inclemencia
El año pasado el circuito de Suzuka no se salvó del mal clima y el GP japonés fue alterado. Luego de una serie de retiros y choques al inicio, la FIA determinó llevar a cabo la carrera por tiempo (40 minutos) y por lo mismo sólo se completaron 28 de las 53 vueltas previstas.
Max Verstappen fue el ganador del Gran Premio, seguido de su coequipero Sergio 'Checo' Pérez y de Charles Leclerc de Ferrari. En esta ocasión la F1 sí premió con el total de puntos correspondientes a los pilotos a pesar de que apenas se completó la mitad del evento.